sábado, agosto 15, 2009

Provocando a la Sociedad Secreta

Aprovechando que nos quedan menos de tres telediarios y que sólo se vive dos veces (la que se sueña y la que te toca) Decidimos probar a los charlies del compaund a pesar de contar con oscuros precedentes anteriores con un filete y una presunta tortilla de patatas. La prueba en cuestión consistía en pedir un arroz a la cubana.
Como tampoco somos unos suicidas, le pedimos el plato por separado, como para explicarles a estos lo que significa "a la cubana" si nunca han visto una...
Hacer un buen arroz lleva tiempo. y si encima les tienes que explicar que lo tienen que rehogar con ajo la prueba queda fallida por concepto. Así que obviamos la parte del arroz y admitimos que trajeran simplemente arroz blanco a su gusto.
Siguiente paso, los huevos fritos. Fácil. Están en la carta. "Fried eggs"
Y un poco de tomate, que no sea ketchup. "Afortunadamente" hacen una salsa de tomate para unos spagettis napolitna que podría servir. Aquí la complejidad está en evitar que te traigan con la salsa los sapgatties.

Llamamos al camarero, viene el egipcio que no tiene ni puta idea de inglés. Toma ya western compaund. Empezamos bien, la cosa promete.

T- Quiero dos huevos fritos.
M1-Yes sir.
T- Pero dos huevos fritos, no quiero tortilla.
Cara de subnormal profundo.
T-¿Tenéis huevos fritos?
La cara pasa a prototipo de eslabón perdido.
T- ¿Hablas inglés? (Pregunta sin esperanzas de respuesta)
En este momento, Crispal me echa un mano y le pone en su sitio con su académico árabe:
C- No Puede ser que estés trabajando en un compaund occidental y no sepas hablar inglés. Vete y trae a alguien que sepa hablar inglés.
Se va y viene el que suele estar detrás de la barra, que parece ser que tiene facultades para expresarse en inglés.
Repetimos la operación.
T-Quiero dos huevos fritos, un plato de arroz y me traes una salsa de tomate. Pero que no sea Ketchup, como la de los spagetties Napolitana.
C- A mi me traes dos huevos fritos y unas patatas fritas.
M2- Yes Sir.
Se queda un poco pensando...
M2- ¿Spagetti Napolitana?
T-No, no quiero spagetti napolitana, quiero que me traigas la misma salsa que usáis para los spagetis napolitana, pero no queiro spagettis napolitana.
M2- Yes Sir.
T- Ah, y queremos huevos fritos, no tortilla, huevos fritos. (Aquí anticipándome a la jugada aún sabiendo que es en vano y que la van a cagar)
M2- Yes sir.
Con la saturación mental que llevaba se le olvida tomarnos nota de la bebida, así que le volvemos a llamar y pedimos una botella de agua y un zumo de naranja.

Mientras esperamos, nos tememos lo peor, que nos traigan unos spagettis napolitana. Pero la sociedad secreta nunca deja de sorprendernos. Al rato, pero al buen rato vienen con una serie de platos; unas patatas fritas, un plato de arroz.... y dos platos de tortilla/revuelto y uno de ellos todo rojo. A una de las supuestas tortillas la habían rebozado bien con la salsa.

C-Eso no son huevos fritos. Hemos Pedido huevos fritos no tortilla.
M2- Cara de no sé por qué he nacido con lo bien que estaba en el inframundo.
C- Hue-vos fri-tos, -señalando la carta-
A todo esto se acerca otro camarero que se ha percatado del incidente y se le ocurre decir:
M3- ¿como dos ojos?
C- Si.

Al cabo de 15 minutos... tiempo excesivo para hacer unos huevos fritos, a saber en que leches habrán empleado los otros diez minutos, nos traen dos platos con sus correspondientes huevos fritos y un cuenco con la salsa sin los spagetties.

Evidentemente la combinación de elementos no dio como resultado un arroz a la cubana, pero al menos se puede considerar prueba superada.

Como Nota final, señalar que Crispal pidió que le hicieran los huevos fritos con aceite de oliva, pero una cosa es poner a prueba a la sociedad secreta, y otra intentar un mortal en una piscina sin agua.