miércoles, octubre 17, 2007

Jeddah de noche

Después de una buena ducha en el hotel salimos con el coche dispuestos a la aventura. GPS en mano para evitar perdernos, o mas bien para perdernos tranquilamente.
Llegamos al barrio histórico de la ciudad, o por lo menos a la parte mas antigua de la misma, aquella donde las casas lucen unas balconadas de madera muy curiosas y bonitas. Nos metemos por una calle estrecha y nos topamos con un atasco. Que cosa mas rara. Avanzábamos lentamente y eso nos permitía ver a todo tipo de fauna, desde negras eritreas a niños corriendo descalzos, barbudos de todo tipo, chavalería montando en minimotos metiéndose por todos lados...
Hasta que llegamos a una plaza donde habían montado una especie de feria en el barrio, y claro, en vez de cortar la calle, los coches pasábamos por en medio.

La feria era sencillamente espectacular, norias y barcas movidas a "manubrio", burros y ponys para dar paseos al personal, jaimas con televisores y niños jugando al futbol con la PS2, todo el mundo contento y feliz celebrando el final del Ramadán y nosotros con el coche en mitad del feria como si fuéramos seres de otro planeta.
Hacer una foto era bastante complicado, no sea que se cruzara alguna mujer y nos la montaran
Una vez que conseguimos salir de aquella marabunta llegamos a las puertas de lo que parecía un zoco. Aparcamos el coche y nos dispusimos a entrar.... Calles con tiendas a los lados de todo tipo de material textil, tiendas de electrónica cuyos cacharros eran básicamente "electrónicos", como las tiendas de los chinos, tiendas de especias con olores francamente indescriptibles... todo ello a lo largo de una calle interminablemente larga, peatonal y asfaltada al tun tun. Llegamos a una zona donde tenían una de esas casas típicas restauradas y donde curiosamente estaba permitido hacer fotos siempre y cuando se contase con el beneplácito de la autoridad.
Casa típica de Jeddah con su balcones de madera
Unas cuantas fotos alrededor de la casa ( a la casa en si no, que era mas interesante los alrededores) y a continuar el camino a ver si conseguíamos llegar al final de la calle.
Imagen del zoco - vía comercial, el día que inventen la cámara con olor se acabaron los recuerdos.
Para eso tuvimos que atravesar un túnel peatonal que olía a demonios y en donde todo el mundo gritba para hablar. Al salir nos metimos de lleno en una zona cubierta en donde las tiendas estaban mas "preparadas" y la calle está embaldosada. Com mujeres sentadas y vendiendo cachivaches (increibleble) al lado de los típicos indios, pakis o lo que fueran vendiendo otros cachivaches a la par que se urgaban los pies con las manos. Y ya por fin llegamos al final. Abrumados por tantos estímulos golpeando todos nuestros sentidos volvimos al coche dispuestos a buscar un sitio para cenar. No tardamos ni la mitad de tiempo en volver.

2 comentarios:

Javi dijo...

Lo que me temía,la misma m... de siempre :(

-=Tekena=- dijo...

Hombre, tiene su "encanto", pero si, es lo mismo de siempre.... :P