jueves, octubre 11, 2007

Una de espias

Hartos un poco de que nuestra obra esté siempre sucia y que los de la constructora sean unos chapuceros (estar todo el día con el látigo cansa) decidimos visitar la obra vecina, pues la mirábamos con envidia ya que parecía infinitamente mas limpian que la nuestra. Nada mas alejado de la realidad.
Nos metemos en la obra sin que nadie nos diga nada, no porque nos lo fueran a decir, sino porque no había nadie. Ni siquiera en la caseta a donde fuimos a presentarnos y a pedir permiso para verla. Ya que nadie nos impedía el paso, nos pusimos los cascos y nos metimos en el interior. Y allí vimos que todo era la misma mierda y que las cosas no se caen porque Ala les protege y trabaja a tracción. Si estaba mas limpia, pero la maquinaria era de museo y nos encontramos morunadas parecidas a las que nos hacen a nosotros en la construcción.
Nos encontramos con un par de trabajadores despistados que andaban por ahí y que nos saludaban y nos miraban con cara rara... a ver unos cuantos blancos con cascos y botas de seguridad en vez de chanclas y pañuelo en la cabeza... y con planos en la mano, pues normal que se asustaran un poco.
Fábricas sin aparejar, hormigones disgregados, zanjas sin vallar, losas hundidas, dinteles riéndose de Newton, un espectáculo.
En resumen mas vale malo conocido por que vete tú a saber que hay por ahí.

2 comentarios:

dodger dijo...

A nada que le hubieses echado un poco de morro, seguro que los curritos os obedecían sin problemas, je, je. Tenías que haber aprovechado para cambiar algunas cosas de sitio XD

Equisese dijo...

Pero nada se les cae..eso es que Allah les protege, por eso Abu FLus nunca tiene un accidente (q ya es decir)....mmmm!da q pensar